XXII Festival Internacional de Música Contemporánea PUCV – Darwin Vargas culmina una semana de estrenos, invitados internacionales y amplia participación del público

El XXII Festival Internacional de Música Contemporánea PUCV – Darwin Vargas finalizó con una destacada participación de público y la presentación de invitados nacionales e internacionales, consolidando una semana dedicada a la creación, investigación y difusión de la música contemporánea.

La actividad fue organizada por el Instituto y Conservatorio de Música de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y financiada por el Fondo para el Fomento de la Música Nacional, Convocatoria 2025 del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio (MINCAP).

Entre el 10 y el 14 de noviembre, diversos espacios de Valparaíso albergaron conciertos, estrenos absolutos, conversatorios, mediaciones y actividades formativas, con la participación de agrupaciones, compositores e intérpretes provenientes de Chile, Italia, Holanda, Bolivia, Argentina y Uruguay. La inauguración incluyó un homenaje al compositor Gabriel Matthey Correa y una intervención audiovisual mediante técnica de mapping, incorporada por primera vez en la historia del festival.

A lo largo de la semana, el público pudo acceder de manera gratuita a presentaciones de ensambles nacionales e internacionales, cuerpos artísticos PUCV, estrenos de nuevos talentos y obras recientes de compositores consolidados. El cierre reunió a la Orquesta Andina PUCV y a la Orquesta Experimental de Instrumentos Nativos de Bolivia, en una colaboración que integró tradición, innovación y diálogo intercultural.

Para el director del festival, Félix Cárdenas Vargas, esta edición reafirmó el valor del encuentro como espacio artístico y formativo. “El festival nos recuerda la importancia de abrir instancias que promuevan la creación, la investigación y el intercambio entre comunidades musicales. Agradecemos al público, a los compositores, intérpretes e instituciones colaboradoras por hacer posible esta nueva versión”.

El componente educativo del festival incluyó conversatorios, masterclass, talleres, mediaciones artísticas y conciertos pedagógicos, fortaleciendo el vínculo entre la universidad, la ciudadanía y el ecosistema cultural regional. Todas las actividades fueron de acceso liberado, promoviendo el acercamiento de nuevos públicos a la música contemporánea.